jueves, 29 de octubre de 2009

Y COMO LA PRIMERA VEZ Y LA SEGUNDA PRIMERA NO FUERON LAS MEJORES...

Este es el tercer artículo de octubre de 2009 que me traigo de otro blog...
Pues seguí buscando... ¡cómo no aburrirme yo misma en mis clases!
Pero lo frutos no empezaron a llegar hasta el año pasado que encontré que el aula de informática disponía de cañón y podía plantearme no sólo dar allí esa clase, sino todos también algún módulo más teórico como Marketing Punto de Venta.
Empecé a prepararme presentaciones Power Point con enlaces a artículos, páginas web o vídeos colgados en Youtube, que hicieran más amena la explicación. pero nada era suficiente, había abierto la caja de Pandora, buscando material por Internet para mis clases apareció Wikispaces en mi vida. Poco a poco fue creciendo sólo, haciéndose grande por sí mismo laclasedelaura
Comencé creando unas páginas por módulo, con enlaces y subiendo los documentos que quiero que se lean o impriman, las prácticas de clase.
Descubrí los Gadgets para wikis y cómo subir vídeos, que yo misma realizaba con Picasa, de las fotos que realizábamos en el taller de animación punto de venta. Añadí formularios para hacerles preguntas que me interesaban y con Calendar de Google aprendí a tenerles informados de las fechas de exámenes y otros varios.
¡Esto promete!

jueves, 22 de octubre de 2009

No puede haber una segunda PRIMERA VEZ, pero en este caso sí... porque es otra PRIMERA VEZ...

Este artículo también ha migrado desde otro blog y fue escrito en octubre de 2009.


No puede haber una segunda PRIMERA VEZ, pero en este caso sí... porque es otra PRIMERA VEZ...
Fuente FlickrNo había impartido clases formales en mi vida; alguna clase particular en mis años de adolescencia a algún vecino para ganarme un dinerillo, algún entrenamiento a empleados sobre el funcionamiento a nivel de usuario de SAP en el departamento de planificación de inventarios en Suiza, algunas presentaciones a la fuerza de ventas o a clientes. Así que llegado el momento de enfrentarme a LA PRIMERA VEZ que di clase, me encontré con la terrible sensación de no saber ni cómo empezar.
Porque ¿CÓMO tiene que ser un profesor? ¿alguien distante poco dado a las confianzas con sus alumnos que enumera conceptos?. Eso no iba conmigo. Me cuesta representar un papel, y fingir una pose durante todo un curso se me hacía difícil. Así que opté por la naturalidad y la cercanía, manteniendo siempre el respeto. Eso siempre me ha funcionado salvo en dos tipos de alumno:
  • El pelota, el que cree que te "ha ganado" y que has caído en sus redes. Sin ser capaz de darse cuenta que esa accesibilidad no es sólo para él (uso el masculino, porque creo que el prototipo de pelota es la mayoría de las veces y según mi experiencia, hombre) y que el día que descubre -cuando ve una baja calificación- que no ha funcionado, se indigna y te planta cara.
  • El rebelde o niño difícil, que en mi caso fue con las niñas de Garantía Social. Esa proximidad les hacía verte como una igual y perdían el poco respeto que en general tenían a los adultos. Tenían problemas para mantener viva la línea que separa al profesor del colega.
Así que aquella PRIMERA VEZ, tome la decisión de ser yo misma. Y surgió la segunda duda, ¿CÓMO? ¿cómo dar las clases para no aburrirme yo y no aburrirles a ellos? ¿cómo engancharles? Y ahí sigo. Tratando de dar respuesta a esa pregunta día a día y, espero que por el buen camino.
Siempre he creído que para aprender hay que "tocar", experimentar lo que te cuentan. Que no es lo mismo practicarlo, equivocarte y reparar el error; que estudiar y memorizar un abanico de posibles situaciones y soluciones. Pero mis temarios, los módulos que puedo impartir en los ciclos de Comercio son en la mayoría de las ocasiones muy teóricos. Así que para mí no había nada más frustrante que enfrentarme a un módulo de Marketing en el Punto de Venta, con un libro y una pizarra tradicional.

jueves, 15 de octubre de 2009

MI PRIMERA VEZ


Este artículo lo escribí en otro blog, en octubre de 2009, pero estoy unificando y lo traigo aquí.


Pues sí, esta será la PRIMERA VEZ que escriba un artículo en el Blog que acabo de crear.
Y, sí, lo que parecía un título sugerente se ha convertido en un artículo de un tema anodino sólo con leer la primera frase. No hace falta ser un lince para intuirlo.
En realidad, en este primer artículo me gustaría empezar por presentarme y explicar cómo he llegado hasta aquí. En los siguientes trataré de haceros entender la evolución "tecnológica" de mis clases y cómo creo que emplearé el mundo 2.0, con todo lo que estoy aprendiendo en los cursos que actualmente recibo: Aplicaciones Educativas en los Blogs y Comunicación Digital y Networking.
Me llamo Laura Colorado, estudié Ciencias Económicas en la Universidad Complutense de Madrid hace... una eternidad.
Empecé a dar clases en ciclos de Comercio y Marketing en el año 2001, después de haber trabajado seis años en una multinacional americana, en los departamentos de marketing y logística. Durante esos años de empresa privada aprendí qué es trabajar en una empresa privada y qué es dedicarse al 150% al trabajo, porque sí. Peleé para que mi vida personal dirigiera el ritmo de mi vida en general y que no lo hiciera el trabajo, a pesar de las jornadas interminables de más de 10 horas.
Decidí cuando tener a mis hijos, y no la época más o menos buena de trabajo, el cambio de jefe o de puesto; porque pensé que lo que en ese momento me podía llevar a retrasar una decisión así, nueve meses después podía ser o no de aquella manera. Pero aquello se hizo difícil de digerir cuando me di cuenta de que ver a mi hijo despierto se hacía prácticamente imposible, desde el día que me incorporé de la baja maternal. Le dejaba dormido en casa de sus abuelos por las mañanas y, al llegar a casa por las noches, mi marido lo mantenía despierto para que pudiera verle unos instantes. Así fue como tomé LA DECISIÓN. No había dinero que pagara aquel sacrificio, ni ascensión meteórica que me pudieran ofrecer para que me quedara allí.
Preparé una oposición, en aquel momento daba igual cual, una que tuviera que ver con lo que yo había trabajado y que se convocara lo antes posible... mi objetivo... CAMBIAR NIVEL DE VIDA POR CALIDAD DE VIDA. Nunca me pagarían lo mismo, pero nada sería igual. La fortuna me vino a ver y la oposición que preparé en tres meses y sin dejar de trabajar, la aprobé, gracias a un golpe... o dos, o tres de suerte.